Este año, el campo michoacano sufrirá una reducción en el suministro de agua para riego, lo que ya encendió las alertas de los productores del valle de Zamora, quienes consideran que se agudizarán los problemas del sector agropecuario.

A principios del 2024, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) determinó reducir 50 por ciento el suministro de agua para los cultivos, debido a las bajas precipitaciones pluviales que se registraron en 2023.

En concreto son los municipios de Zamora, Jacona y Tangancícuaro los que resentirán de manera más aguda la problemática, pues de los 50 millones de metros cúbicos que se concesionan para cultivos sólo llegará la mitad.

A lo anterior se suma lo dicho por el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) Cuauhtémoc Ramírez Romero, quien afirmó que este año habrá reducciones de agua del 10 al 15 por ciento, "dependiendo de las condiciones", y recordó que en el período de otoño-invierno del año pasado hubo una reducción del 30 por ciento.

De acuerdo con el funcionario el año pasado la sequía impactó 58 mil hectáreas en todo el estado, sobre todo de maíz y sorgo en áreas de temporal.

Para este 2024, dijo Ramírez Romero, se prevé que la sequía continúe debido a la presencia del fenómeno "El Niño" y el cambio climático.

Ante esto, productores de Zamora indicaron que esto traerá como consecuencia no sólo que se reduzcan las superficies de cultivos sino también la dotación de alimentos para el ganado, lo que pondrá en una situación grave el sector.

Agroindustriales como Juan Estrada y Ramón Plancarte consideraron que una de las opciones sería optar por cultivos que requieran una menor cantidad de agua, como cártamo, cebada y avena.

No obstante, previeron que la situación se torne todavía más complicada en virtud del anuncio de la Conagua y del gobierno estatal.

En el valle de Zamora, durante 2023 fueron cerca de 17 mil las hectáreas de la región las afectadas por la sequía extrema, principalmente de cultivos de maíz, sorgo y alfalfa.

PROYECTOS HÍDRICOS

A fines de enero, el gobernador Alfredo Ramírez informó que para contrarrestar la sequía severa que asola el valle de Zamora la prioridad será el rescate del Río Duero.

El mandatario informó que se construyen plantas tratadoras de aguas residuales y colectores de agua en los 10 municipios que integran la cuenca.

El gobernador resaltó que su gobierno invierte 400 millones de pesos en la construcción de una planta tratadora de aguas residuales en Zamora, que será de gran beneficio para el uso agrícola.

Señaló que todas las presas de la entidad se encuentran a un 60 por ciento de nivel y lo normal sería un 90 por ciento, derivado de las bajas precipitaciones que se registraron en el periodo pasado.

Explicó que el 75 por ciento del agua se aplica en el campo, en actividades agrícolas principalmente, mientras que el 25 por ciento restante se emplea para consumo humano, por ello, se tienen que ejecutar medidas para crear conciencia en el uso del vital líquido.