Morelia, Michoacán.-Hace dos años, la médico veterinaria Andrea Ceballos Camargo abrió un espacio donde pudiera atender a la salud perruna desde tres frentes: lo médico, sí, pero también desde lo estético y el spa.
Esta profesional de la salud entiende que son elementos interrelacionados, pues como lo contó en entrevista “desde que abrí fue mi idea abrir veterinaria y spa, porque me gusta y porque se da un servicio más completo”.
Y es que son actividades conectadas por las siguientes razones descritas por Ceballos Camargo: “en el baño puedes darte cuenta de muchas cosas en los perritos, no sólo es bañarlo, porque ves su piel, su pelo, sus ojos, sus oídos, uñas y te puedes llegar a dar cuenta de alguna lesión, enfermedad o problema dermatológico que tengan”.
Son cosas que pueden pasar inadvertidas para los dueños, pero que se muestran ante los ojos de un veterinario al momento de atender a los perros. “De hecho, en el spa doy unas hojas en donde se marca que se da revisión general, no es una consulta tal cual pero sí puedo ver aspectos”.
Se trata de una revisión, dijo, a zonas como los oídos, la piel, dientes, uñas y pelo, “ahí les comento si veo otitis, algo que es muy común en los perros, es una infección en los oídos que se debe a algún cuerpo extraño”.
También puede ocurrir, agregó la veterinaria, que en los dientes “haya mucha acumulación de sarro, eso puede llegar a generar problemas en el corazón, a veces también les causa dolor al comer porque las encías se inflaman mucho, pero ahí se recomienda una profilaxis para prevenir enfermedades, además de quitar el mal olor”.
Otras de las afecciones que pueden pasar desapercibidas para los dueños, expuso la veterinaria, son las dermatitis en los perros con mucho pelo, “pero nosotros al momento de peinarlo y bañarlo vemos la piel y ya nos damos cuenta”.
Son cosas que se pueden ver durante el tratamiento estético y que Ceballos Camargo comenta a los dueños. Pero eso sí, la decisión de lo que sigue ya es de los dueños, “ellos verán si le dan seguimiento, si los quieren tratar o no”.
Por todo lo anterior, expuso, es que desde la apertura de Petmanía “quise complementar la estética porque es algo que piden mucho los clientes pero también nos permite conocer al perrito, saber si tiene alguna enfermedad o lesión”.
En la parte de spa, mencionó, “lo manejo porque ponemos shampoos hidratantes, enjuagues y tenemos una gomita para bañarlos que al pasarla sobre ellos les hace masajito, entonces los relaja y también llegamos a poner música que los relaja”.
En esta parte, expresó que la música que emplean es literalmente la misma que se utiliza en los spa humanos, algo que ayuda sobretodo cuando les llegan perros muy estresados, “cosas como instrumental, sonidos de la naturaleza, eso les llegamos a poner para que se relajen”.
Ropa canina
El espacio cuenta con algunas piezas de ropa canina y, a propósito de esto, se le cuestionó a Ceballos Camargo sobre qué y cómo se recomienda el uso de esta indumentaria, la cual no necesariamente es sólo de uso ornamental.
Explicó entonces que “sí se recomienda pero obviamente hay cosas que se deben valorar, como la edad, la raza y el momento en que se va a poner; por ejemplo, hay perritos que son mayores de edad y sufren problemas de articulaciones, a ellos les afecta más el frío y les causa dolor, en ese caso sí se recomienda poner ropa; en cambio, no le vas a poner suéter a un husky, tampoco se van a poner estas cosas a las dos de la tarde”.
Pero si lo que se quiere es adornarlos, es necesario ver los signos de comportamiento del cánido para evitar estresarlo. En este punto, mencionó Ceballos Camargo “depende mucho del perro, dan signos de estrés en diferentes formas, por ejemplo lloran, rompen cosas, andan inquietos, muerden cosas o se hacen del baño para llamar la atención; depende mucho del perrito, de cómo lo conozca su dueño y note cómo está siendo su comportamiento diferente”.
Tener en cuenta lo anterior es pertinente al considerar que viene la época de Halloween y hay quienes pueden considerar disfrazar a sus perros, lo cual no necesariamente es negativo pero sí es necesario prestar atención a la reacción del cánido.
