Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- La posibilidad de institucionalizar a los grupos de autodefensa que han comenzado a resurgir en regiones como Tierra Caliente y el Oriente de Michoacán fue descartada por el secretario de Seguridad Pública, José Alfredo Ortega Reyes, quien reiteró la advertencia de que se procederá al desarme de estas agrupaciones, a través de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
El responsable de la seguridad en Michoacán reconoció el crecimiento en el número de civiles armados adheridos a la agrupación denominada Pueblos Unidos en Ario de Rosales, Taretan, Nuevo Urecho, Salvador Escalante y Pátzcuaro, así como en otros municipios ubicados en Tierra Caliente: Aguililla, Tepalcatepec, La Huacana, Coalcomán y Chinicuila.
El general Ortega Reyes desestimó la legitimidad de estos grupos de civiles armados, en coincidencia con el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, quien hace apenas unos días advirtió que las autodefensas que han venido resurgiendo en Michoacán serán desarmadas.
“En teoría es un movimiento social que surge por ciertas demandas, pero la estabilidad se mide en la relación demandas-respuesta de gobierno, siempre y cuando sean legítimas; de lo contrario, un grupo de este tipo pierde precisamente eso, legitimidad”, subrayó.
Ortega Reyes fue enfático al señalar que el gobierno de Michoacán no permitirá la institucionalización de estos grupos de autodefensa, en franca referencia a un episodio que el estado vivió en 2014, año en que el entonces comisionado para la Seguridad y Desarrollo Integral del Estado, Alfredo Castillo Cervantes, legalizó la operación de civiles armados que decían luchar contra la delincuencia organizada.
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