Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- Alrededor de seis mil estudiantes de San Juan Nuevo Parangaricutiro, Matanguarán y Aguililla podrían resultar afectados por la suspensión de clases presenciales ante la violencia de los últimos días en esos lugares; la Secretaría de Educación del Estado (SEE) de Michoacán indicó que las clases virtuales en la primera localidad probablemente se extenderán, luego de la balacera que se registró el pasado 10 de marzo.
Te podría interesar: En San Juan Nuevo y Aguililla suspenden clases por violencia
Asimismo, en Matanguarán los docentes que fueron rescatados por policías estatales al quedar atrapados en un enfrentamiento entre grupos armados ese mismo día, no han regresado a la comunidad. Reportes locales refieren que los estudiantes y profesores se resguardaron en una escuela desde las 9:40 hasta las 12:30 horas para evitar ser alcanzados por las balas.
En Aguililla, el jueves pasado y por cuenta propia, los docentes determinaron no acudir a las escuelas ante el asesinato del alcalde, César Arturo Valencia Caballero y su ex asesor, René Cervantes Gaytán. El presidente municipal perteneciente al Partido Verde, fue acribillado después de las 16:00 horas a un costado de una cancha de futbol.
De acuerdo a la SEE, en el municipio Nuevo Parangaricutiro hay 22 escuelas, cuatro mil 192 alumnos, 188 profesores y 45 administrativos lo que da un total de 233 trabajadores; en Matanguarán tres planteles, 160 estudiantes, nueve docentes y un personal de apoyo, en tanto en Aguililla 59 escuelas y dos mil 10 niños y adolescentes que acuden a las instituciones.
A pesar de que en los tres lugares se suspendieron las clases presenciales, la dependencia educativa solo dio dicha indicación a las escuelas de San Juan Nuevo. La circular 12/2022 firmada por la titular Yarabí Ávila González dictó que que el 11 de marzo quedaban suspendidas las actividades escolares presenciales en todos los planteles de todos los tipos y niveles educativos públicos y privados del municipio.
Escuelas cerradas en Tierra Caliente
El 17 de febrero de este año, Ávila González refirió ante medios de comunicación que en Michoacán permanecían cerradas 29 escuelas por inseguridad, principalmente en la zona de Tierra Caliente; esta cifra equivale al 0.23 por ciento del total de instituciones de nivel básico, pues son alrededor de 12 mil 500 planteles en la entidad.
En ese momento, la secretaria aseguró que la comunidad escolar continuaba trabajando a distancia de forma virtual. "Hicimos una gira de trabajo por la costa michoacana, visitamos las escuelas y están trabajando, lógicamente siguiendo el protocolo 50 a 50 y se dividen. Hay algunas donde se tienen conflictos de inseguridad, ahí se trabaja de forma virtual", dijo.
Te podría interesar: Alfredo Ramírez señala que autodefensas trabajan para cárteles
Respecto a una estrategia que pueda beneficiar a los estudiantes de estas regiones que viven en medio de una ola de violencia y sin los recursos necesarios para seguir con sus estudios, la titular de la SEE ha indicado que se trabaja en la construcción de un plan para que no se sigan viendo afectados, aunque por el momento, no ha habido resultados.
Brecha digital en Michoacán
En el estado existe una fuerte brecha digital debido a la falta de luz, conectividad y aparatos tecnológicos, lo que impide sostener un modelo virtual, sobre todo en las zonas rurales. Datos de la SEE refieren que durante la actual y pasada administración se otorgaron cinco mil tabletas y computadoras en la Meseta Purépecha, Región Costa y Centro, pero solo cuatro de cada 10 hogares cuentan con internet.
“El escenario que se vive en el estado y del cual tiene registro la dependencia estatal es adverso para las clases a distancia (…) de igual forma, la estadística nos arroja que en tres de cada 10 casas cuentan con una computadora, laptop o tablet”, señaló la institución.
Educación con Rumbo, un grupo que representa a la comunidad educativa en México, organizaciones sociales, padres de familia, especialistas y universidades, informó el pasado mes de enero que miles de niños y jóvenes han tenido que suspender sus estudios porque carecen de las herramientas para tomar clases en este formato.
El representante de la Asociación de Padres de Familia en Michoacán, Juan Bernardo Legarreta, dijo que los intentos de dotar a las comunidades de medios tecnológicos no se han consolidado y el tener un modelo de información siempre va a permitir mayores capacidades para la vida, en función del aprovechamiento particular de cada estudiante.
Durante los últimos años en Michoacán, además de la pandemia que ha dificultado el desarrollo educativo de los niños y adolescentes, la inseguridad y la ola de violencia se ha vuelto un factor que influye para que los alumnos abandonen las escuelas.