Morelia, Michoacán ( OEM-Infomex).-Luego de que Morelia obtuvo por el Consejo de Salud estatal la bandera amarilla, este fin de semana se activaron los negocios en la capital michoacana, sin embargo, las ventas no se activaron como imaginaron los empresarios.
La pandemia no solamente ha dejado muertos, también ha dejado mermas en la economía local, para el caso de los comerciantes del Centro Histórico de Morelia se perdieron siete millones de pesos por cada domingo cerrado, estimó su líder, Alfonso Guerrero Guadarrama.
Si bien el centro de Morelia tiene actividad, la crisis económica ha dejado estragos en las ventas, debido a que no hay estabilidad y certeza para sostener un trabajo fijo, ya que por cada día que no se labora crece la posibilidad de cierres de locales, dijo el presidente de los comerciantes organizados.
Para el caso de los locatarios del mercado sobre ruedas de la Carestía, el cual se sitúa en la explanada del antiguo recinto ferial, Fernando Ortiz, vendedor de fruta mencionó que normalmente los productos comestibles no sufren mermas, pese a la situación actual de la economía, ya que se trata de una necesidad humana el comer, mencionó.
En el caso de los comerciantes que venden productos de la canasta básica, las pérdidas que registraron fue cuando se suspendió la actividad el domingo, ya que muchas amas de casa trabajan y no pueden ir al mandado otro día de la semana, opinó.
Por otra parte, los trabajadores de Espacio Las Américas opinaron que descansar los domingos alteró sus ganancias, puesto que la mayoría de ellos reciben comisiones y los días más fuertes de venta son los fines de semana, comentó en entrevista, Patricia García, quien es vendedora de una tienda departamental.
Por los pasillos y pisos del centro comercial hubo movimiento, no así en las cajas registradoras, aseguró Laura González, gerente de una joyería, donde no han repuntado las ventas, pese a que recientemente pasó el Día del Amor y la Amistad .
Finalmente, los cines y juegos infantiles de la plaza se apreciaron sin clientes, pese a que en la plaza se pudo ver niños de todas las edades, sin embargo, los negocios abrieron este primer domingo de “regreso a la nueva normalidad”.