PARÍS, Francia. Por una cómoda mayoría, pero inferior a la esperada, 56.4% de los electores de Nueva Caledonia rechazaron independizarse de Francia, según los resultados definitivos del referéndum realizado ayer en ese archipiélago del Pacífico sur, a 18 mil kilómetros de París.

En un mensaje difundido tras conocerse el dictamen de las urnas, el presidente Emmanuel Macron interpretó ese resultado como una "muestra de confianza en Francia, en su futuro y sus valores".

La consulta, que se caracterizó por una participación excepcional (80%) y la ausencia de incidentes notables, demostró un sensible avance de las tesis separatistas, muy superiores a lo que preveían los sondeos. Las últimas encuestas habían estimado que el voto por el “no” a la independencia triunfaría por más de 65%.

Para los independentistas, el resultado significa un avance importante de su proyecto, pues los acuerdos de Numea, firmados en 1998 e incluidos en la Constitución, prevén la convocatoria de otros dos referendos en los próximos cuatro años, si la solicitud es apoyada por un tercio de los 54 diputados, con 25 separatistas.

"El pueblo se ha despertado, estamos a un paso de la victoria", aseguró el líder independentista Alosio Sako. Alentado por los progresos del voto favorable a la independencia anunció que dentro de dos años pedirán un nuevo referéndum, como les permiten los acuerdos de Numea.

Para Macron, los únicos derrotados de la consulta fueron "la división y el miedo" frente a "la paz y el espíritu de diálogo y responsabilidad de todos”.

La consulta había sido acordada hace 30 años como una de las medidas negociadas por el exprimer ministro Michel Rocard en 1988 para evitar una guerra civil entre los colonos franceses y la población autóctona de origen canaco.

Para consolidar el diálogo entre ambas comunidades, el primer ministro Édouard Philippe llega hoy a Numea, la capital del archipiélago de 269 mil habitante, para reunirse con los líderes políticos a fin de discutir en futuro de este territorio, uno de los más prósperos de Francia gracias a sus importantes reservas de níquel.