Productores de maíz del valle de Zamora estimaron que por la sequía este año la reducción de siembra será hasta del 50 por ciento.
Las siembras inician a finales de junio, pero los productores ya anticipan que la falta de lluvias propiciará que haya un retraso, lo que aumentará la crisis en el sector.
Otro factor crítico es la poca venta que logran garantizar ante Seguridad Alimentaria Mexicana (SEGALMEX), pues si bien la producción es de unas 100 mil toneladas, no hay capacidad para adquirir todo el producto.
Rubén Alfonso Garibay, productor de maíz de la comunidad de San Esteban., dijo que desde hace más de 6 años no se ha dado ningún apoyo para el sector.
Esta situación es compartida por los productores de maíz de la Ciénaga, quienes señalaron que debido al bajo precio del grano y la sequía el sector atraviesa una severa crisis.
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En una reunión con autoridades de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), los productores de los municipios de Sahuayo, Venustiano Carranza, Pajacuarán, Cojumatlán y Marcos Castellanos señalaron que enfrentan serios problemas de producción y de comercialización.
Expusieron la necesidad de que Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) aumente la compra del grano en Michoacán, ya que en el ciclo primavera-verano 2023 fue de 50 mil toneladas, por lo que piden que pase a 200 mil para el actual.
Señalaron que esto contribuiría a desahogar el problema que enfrentan en esa región, una de las más importantes en cuanto a producción.
Expresaron que, debido a esas problemáticas de bajo precio por tonelada, en la que influyen los precios internacionales del maíz, algunos productores han optado por producir sorgo, grano que posteriormente les presenta incertidumbre para su comercialización.
En la reunión con los funcionarios de la Sader se expuso la necesidad de abordar los temas ambientales, con acciones como el saneamiento de aguas residuales y la rehabilitación de presas.
Otro planteamiento fue mejorar la conducción del agua, ya que señalaron que actualmente se pierden 70 de cada 100 litros destinados al riego.
Otra denuncia que plantearon fue el proceso de deforestación que vive la región debido a la sobreproducción que hay en el cultivo de especies como el agave.
Ante esto la Sader refirió que, a través del programa Guardián Forestal, en Michoacán son monitoreadas seis millones de hectáreas, lo que a la fecha ha permitido que se presenten denuncias contra los responsables de ese daño al patrimonio forestal del estado.